*Si lo que quieres es que los alimentos empanados o rebozados salgan más crujientes y menos aceitosos, lo que puedes hacer es añadir una cucharada de agua por cada huevo batido. Además, recuerda que para eliminar el exceso de aceite que pueda haber quedado puedes colocar una hoja de papel absorbente de cocina en el plato o fuente antes de consumir.
*Para evitar que el aceite salte al freír se aconseja colocar una media cáscara de huevo bien limpia durante la fritura. Para saber si el aceite está en la temperatura justa, se recomienda probar con una miga de pan, que deberá dorarse pero no quemarse.
*Hay veces que tras la fritura el aceite usado queda turbio. Una forma de que quede transparente para luego poder colarlo, conservarlo limpio para volver a utilizarlo en otra ocasión, es freír en el aceite turbio una ramita de perejil y colarlo después. Si sigue turbio se puede colar por un filtro de los que se utiliza para el café, una vez que el aceite se haya enfriado.
Vía 20 minutos.es
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