Consejos para despertar libre de resaca

Para despertar libre de resaca, sigue las siguientes recomendaciones. Ya las probamos ¡No fallan!

DURANTE LA FIESTA

Recárgate primero. No consumas una cena líquida; come bien antes de salir. Lo más conveniente es una combinación de carbohidratos y grasas sanas como una hamburguesa de pavo en pan integral entero o queso y galletas de trigo. Para digerir la comida, el cuerpo cierra la válvula que va hacia el intestino delgado, donde el alcohol es absorbido más rápidamente. Por eso, consumiendo este tipo de alimentos, los chances de emborracharte son menores.

Lo transparente. Escoge licores claros como vodka, vino blanco y ginebra en vez de vino rojo o whisky. Los licores oscuros contienen más congéneres, químicos que aumentan la inflamación del cuerpo y que pueden intenfisicar tu resaca.

Mixología. Las gaseosas dietéticas se van de tu estómago más rápido que las regulares. Por eso, si las consumes con licor te vas a marear más rápido. Evita también mezclar tu licor con bebidas energéticas. La cafeína hace que te sientas menos mareado de lo que estás y así no te darás cuenta cuando hayas llegado a tu límite.

CUANDO REGRESES A CASA

Aseo. Cuando te vayas a lavar los dientes, lávate las manos y la cara también. El alcohol suprime las células T que el cuerpo necesita para defenderse, dejándote vulnerable a los gérmenes de la fiesta o del bar, exacerbando los síntomas del guayabo.

H2O. Tomate uno o dos vasos con agua. La deshidratación, efecto secundario del alcohol (diurético), reduce la cantidad de líquido que rodea las células de la sangre, haciendo que tu cerebro “se encoja” dándote dolor de cabeza, mareo y náuseas.

Olvídate de la alarma. Puede que caigas como una piedra, pero la calidad de tu sueño no será muy buena. El alcohol trastorna los químicos del cerebro que regulan el sueño, por lo que vas a pasar menos tiempo en el sueño reparador y más en sueño liviano. Duerme hasta tarde y de pronto te evitas los dolores de la resaca.

A LA MAÑANA SIGUIENTE

Unos huevos. Los huevos son la mejor cura para el guayabo. Contienen cisteína, sustancia que rompe el acetaldehído, toxina en el alcohol que lo produce. Otras opciones son caldos y bananos, ambos restablecen  el sodio y potasio que perdiste durante los viajes frecuentes al baño.

Escoge lo que tomas. Prepárate te de hierbabuena con miel o sírvete un vaso de jugo de fruta 100% natural. La menta calma tu estómago y la miel y la fructosa (el azúcar en la fruta) ayudan a metabolizar más rápidamente el alcohol.

Mata el dolor. Escoge Ibuprofeno. Inhibe la prostaglandina, un mensajero de dolor vinculado a la severidad del guayabo. Evita la aspirina, que irrita tu estómago. Igual con el acetaminofén. Este tiene que metabolizarse a través de tu hígado, que ya de por sí está trabajando extra por el alcohol.

Ve al gimnasio. Al alcohol no lo puedes enjuagar con ejercicio. Sin embargo, algunas personas se sienten mejor si lo hacen, seguramente por los químicos que emite la actividad física y que tan bien hacen sentir.
via tutrend.com